Hola amigos escritores de su vida, con el avance de marzo vamos observando cambios significativos que nos hacen reflexionar acerca de las diversas etapas de la vida y cómo los seres humanos reaccionamos ante estas.
Por las realidades que cada uno de nosotros enfrenta, podemos pensar en más de alguna ocasión, que las cosas no logran avanzar por más esfuerzo que pongamos y eso puede drenar nuestras esperanzas. Sin embargo, notamos que solo es cuestión de tiempo para que se coseche lo que hemos sembrado, y la valoración de nuestros frutos dependerá de la calidad de nuestra siembra (Lucas 10:2).
Eso me hace pensar en la importancia que tiene para nuestra vida la calidad de nuestros esfuerzos, la actitud hacia las tareas emprendidas, el compromiso y las intenciones para lograr lo que nos hemos propuesto; y más allá del beneficio personal, el pensar en el bien común con acciones coherentes, de buen nombre para el prójimo.
Salmos 107:37
Son en esos pensamientos positivos que nos permiten encontrar una dosis de ánimo ya que cada momento es una oportunidad para renovarnos especialmente en los momentos de mayor dificultad y también son los instrumentos para fortalecer nuestras convicciones que nos permiten seguir adelante.
Porque algo que queda claro, es que, a su tiempo segaremos; y nuestro énfasis debe estar entonces en lo que estamos plantando el día de hoy para recibir mañana (1 Corintios 9:10).
Esas pequeñas acciones, hasta las menos pensadas suman a las huellas que estamos dejando en nuestro paso; por lo que las experiencias más difíciles deben recordarnos que únicamente son aprendizajes pero no nos limitan para que nuestra esencia se siga consolidando. Y seguramente en el momento menos pensado, llegarán noticias a nuestras manos, los impactos inimaginables que incidimos en los demás (Salmos 126:6).
No desestimemos la calidad de nuestra siembra, ese potencial, esa valía que existe encada uno de nosotros; fomentando en todo tiempo esos dones y talentos (Marcos 4:31).
¡Hasta la próxima!
The quality of our planting
Hello writer friends of your life, with the progress of March we are observing significant changes that make us reflect on the various stages of life and how human beings react to them.
Because of the realities that each one of us faces, we can think on more than one occasion that things cannot move forward no matter how much effort we put in, and that can drain our hopes. However, we note that it is only a matter of time before what we have sown is reaped, and the value of our fruits will depend on the quality of our sowing (Luke 10:2).
Eso me hace pensar en la importancia que tiene para nuestra vida la calidad de nuestros esfuerzos, la actitud hacia las tareas emprendidas, el compromiso y las intenciones para lograr lo que nos hemos propuesto; y más allá del beneficio personal, el pensar en el bien común con acciones coherentes, de buen nombre para el prójimo. That makes me think about the importance for our life of the quality of our efforts, the attitude towards the tasks undertaken, the commitment and the intentions to achieve what we have set out to do; and beyond personal benefit, thinking of the common good with coherent actions, of good name for others.Eso me hace pensar en la importancia que tiene para nuestra vida la calidad de nuestros esfuerzos, la actitud hacia las tareas emprendidas, el compromiso y las intenciones para lograr lo que nos hemos propuesto; y más allá del beneficio personal, el pensar en el bien común con acciones coherentes, de buen nombre para el prójimo.
Psalms 107:37
It is in those positive thoughts that allow us to find a dose of encouragement since every moment is an opportunity to renew ourselves, especially in times of greatest difficulty, and they are also the instruments to strengthen our convictions that allow us to move forward.
Because something that is clear is that, in due time we will reap; and our emphasis should then be on what we are planting today to receive tomorrow (1 Corinthians 9:10).
Those small actions, even the least thought of, add to the footprints that we are leaving in our path; so the most difficult experiences should remind us that they are only learning but they do not limit us so that our essence continues to consolidate. And surely at the least expected moment, news will reach our hands, the unimaginable impacts that we have had on others (Psalms 126:6).
Let’s not underestimate the quality of our sowing, that potential, that value that exists in each one of us; nurturing those gifts and talents at all times (Mark 4:31).
Until next time!