Hola amigos escritores de su vida, espero que se encuentren muy bien especialmente en esta semana que tiene un significado muy especial e importante para muchos de nosotros.
El término de segunda mano, generalmente es utilizado a todos aquellos productos que se adquieren o compran y que han sido utilizados por una o más personas, pero que, de manera general, éste hace referencia a un significado plural en relación al número de dueños que ha tenido ese producto.
Generalmente los artículos de segunda mano son adquiridos a través de mercados o bazares a un precio módico relativo a su uso, o que en algunos casos representa alguna herencia de amigos o familiares que consideran ya no usar los productos y los regalan a otra persona.
En tiempos de recesión económica, los artículos de segunda mano, se vuelven una opción muy favorable para todo aquel que desea optimizar sus ingresos; por lo que no es nada extraño ver como este tipo de tiendas han incrementado en diversas regiones del mundo, especialmente en los países donde las condiciones económicas son más precarias.
Y este tipo de acción me hace llamar mi atención en vista que en una sociedad altamente consumista, los artículos de segunda mano se vuelven interesantes desde el punto de vista de su valor; ya que lo que para algunos puede ser considerado ya no útil o vigente, para otros, es una necesidad que resulta satisfecha e incluso es un tesoro, sin importar el deterioro que pueda tener por el uso recibido del producto.
Así que llevando este tema a la vida diaria, la segunda mano lo interpreto también como segundas oportunidades, nuevos comienzos, nuevas versiones de nosotros mismos y nuestras relaciones con los demás; ya que en muchas ocasiones y dependiendo de las circunstancias, hemos sido desechados por aquellos que considerábamos eran nuestra primera opción y tal como ocurre con el consumismo nos colocaron en un sitio de canje o adiós en este caso.
Sin embargo, en ese capítulo cerrado, nuestra historia se continua escribiendo; ya que es a través de esa segunda mano, que nos permite conocer nuevos destinos, nuevas compañías, nuevos afectos que nos hacen representarnos como el tesoro que estuvieron esperando y hace que nuestro corazón aprenda nuevas formas de afecto en base a la experiencia y a la razón.
Y es así, como también en esas segundas oportunidades, lo deseo vincular a algo más espiritual y es que es a través de la redención, nuestro Señor y Salvador dio su vida por nosotros, comprando a precio de sangre a lo que se consideraba desechado (Mateo 21:9, Juan 1:29).
Aquel que nos redimió en la cruz de calvario, es el comprador que vio en nosotros a una perla hermosa, al que no le importó pagar un alto precio y que aún en nuestros días lo seguimos celebrando con acción de gracias; por lo que en este jueves de semana santa, no quiero dejar pasar la oportunidad para resaltar lo que desde la creencia del cristianismo representa la conmemoración más importante como lo es la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo (Isaías 53:7, Juan 3:16, Romanos 5:8).
Aunque en esta vida recibamos aflicciones, dificultades, existe ese amor que nos redime y renueva; ese amor que nos restaura y otorga una valía de ser coherederos de algo especial y sublime (Juan 16:33).
Ese amor que nos hace ver con ojos nuevos, con paz, sabiduría y perdón a la vida así como a las circunstancias que debemos enfrentar. En esa segunda mano, existe salvación, gracia y misericordia, también esperanza, fe y amor.
Si te encuentras pasando algún momento de dificultad que te haga considerar la idea que tu camino se ha cerrado y ya no existe algo más para recibir; me permito recordarte que al igual que los productos de segunda mano, nosotros somos personas de nuevas oportunidades porque sus misericordias son nuevas cada mañana y tu nombre lo lleva escrito en su ser.
Somos su obra perfecta, sin importar las cicatrices que hemos acumulado a lo largo de nuestro caminar. Él sigue viéndonos como esa joya de gran valía que compraría en un bazar una y otra vez (Jeremías 31:3).
Celebremos entonces este producto que somos, con acción de gracia y alegría; permitiendo que esas experiencias sea aprendizajes pero que no nos limitan porque cada día tenemos la oportunidad de escribir nuestro Best – Seller llamado vida.
¡Hasta la próxima!
Second-hand
Hello writer friends of your life, I hope you are very well especially in this week that has a very special and important meaning for many of us.
The term second-hand is generally used for all those products that are acquired or bought and that have been used by one or more people, but that, in general, it refers to a plural meaning in relation to the number of owners that have had that product.
Generally, second-hand items are purchased through markets or bazaars at a reasonable price relative to their use, or in some cases represents an inheritance from friends or relatives who consider they no longer use the products and give them to another person.
In times of economic recession, second-hand items become a very favorable option for anyone who wants to optimize their income; so it is not at all strange to see how this type of store has increased in various regions of the world, especially in countries where economic conditions are more precarious.
And this type of action draws my attention to the fact that in a highly consumerist society, second-hand items become interesting from the point of view of their value; since what for some may be considered no longer useful or in force, for others, is a need that is satisfied and is even a treasure, regardless of the deterioration it may have due to the use received from the product.
So bringing this theme to daily life, second-hand I also interpret it as second chances, new beginnings, new versions of ourselves and our relationships with others; since on many occasions and depending on the circumstances, we have been discarded by those who we considered were our first option and as it happens with consumerism they placed us in a place of exchange or goodbye in this case.
However, in that closed chapter, our history continues to be written; since it is through that second-hand, that allows us to meet new destinations, new friends, new affections that make us represent ourselves as the treasure they were waiting for and makes our hearts learn new forms of affection based on experience and reason.
And so, as well as in those second chances, I want to link it to something more spiritual and it is through redemption, our Lord and Savior gave his life for us, buying at the price of blood what was considered discarded ( Matthew 21:9, John 1:29).
The one who redeemed us on the cross of calvary, is the buyer who saw in us a beautiful pearl, who did not mind paying a high price and who even today we continue to celebrate with thanksgiving. Therefore, on this Thursday of Holy Week, I do not want to miss the opportunity to highlight what, from the belief of Christianity, represents the most important commemoration, such as the passion, death and resurrection of Jesus Christ (Isaiah 53:7, John 3: 16, Romans 5:8).
Although in this life we receive afflictions, difficulties, there is that love that redeems and renews us; that love that restores us and gives us the value of being co-heirs of something special and sublime (John 16:33).
That love that makes us see with new eyes, with peace, wisdom and forgiveness to life as well as to the circumstances that we must face. In that second hand, there is salvation, grace and mercy, also hope, faith and love.
If you find yourself going through a moment of difficulty that makes you consider the idea that your path has been closed and there is no longer something else to receive; I allow myself to remind you that just like second-hand products, we are people of new opportunities because their mercies are new every morning and your name is written on their being.
We are his perfect handiwork, regardless of the scars we have accumulated throughout our journey. He continues to see us as that priceless jewel that he would buy at a bazaar again and again (Jeremiah 31:3).
Let us then celebrate this product that we are, with thanksgiving and joy; allowing these experiences to be learning but not limiting us because every day we have the opportunity to write our Best – Seller called life.
Until next time!
